miércoles, noviembre 30

Un momento de reflexión

Y nos acercamos con paso firme al final de otro año. Y el cambio se siente palpitar desde algún punto energético más allá de nuestra comprensión. Porque esta por ahí y no podemos terminar de definirlo. Pero se nota, y casi de manera imperceptible… En la brisa que mueve las copas de los arboles, en las nubes que viajan por distintos cielos, en la forma en que cae la lluvia y en la tierra por la que caminamos.
Y si bien cada fin de año el cambio que se siente es intenso, este año marca el comienzo de una nueva era de comprensión. Porque cada vez es mayor el nivel de conciencia al que se esta llegando… y al mismo tiempo, mayores son las mentiras que se dice el ser humano para tratar de evitar ese conocimiento.
Sin embargo, nadie puede negar que el proceso de evolución, tanto mental como físico esta naciendo. Como se va a desarrollar y que cambios va a generar? No se pueden saber con seguridad. De lo único que podemos estar seguros es que estamos camino a algo nuevo. Depende de nosotros decidir como queremos desarrollarnos…

XXX

Nova Moebius.

viernes, abril 1

Fin del viaje.

Constantemente estamos repasando las elecciones que hicimos. Pero por lo general, las reflexiones suelen profundizarse a medida que nos acercamos al nudo del conflicto. Ya sea por un problema al que le buscamos solución o a la resolución que ya tenemos elegida pero que nos cuesta llevar de la idealización mental a la acción. O tal vez solo porque nos acercamos al final de una de nuestras muchas etapas en el camino de nuestra vida. Y si, en ese momento es donde estoy yo. En ese instante donde si bien ya tengo tomada una decisión todavía parece irreal, porque como siempre, hasta no dar la estocada final, uno no puede decir: fin del juego.
Por eso hoy es el último trecho que camino junto a personas que aprendí a conocer y en algunos casos a querer. Y si, la senda sigue, así sea ascendiendo o curvándose, pero siempre sigue. Pero ya no hay un sendero para mí y es porque elijo no seguir ahí. Porque quiero algo más, y aunque peque de arrogante, algo mejor. Así que por un tiempo, escojo el transitar una vía de total incertidumbre y porque no, abrirme a la aventura por venir.
Fue un camino duro donde aprendí que nunca es tarde para caerse o perder el rumbo. Pero no puedo verlo como algo malo (aunque costo notarlo). Porque todo ese tiempo estuve aprendiendo y creciendo y si, algunos días dolieron. Y mucho. Porque las lecciones que aprendemos nunca aparecen como lo pensamos y nunca pasa tal cual lo planeamos.
Una despedida por todo lo bueno, reflejado en esas personas que me alegro de haber conocido; y por todo lo malo, pero del que siempre algo nuevo se puede aprender. ¿Ser concreta? Jamás podría sintetizar todo lo que paso por mi cabeza durante estos dos años y meses.
Cada lugar al que llegamos es un pequeño mundo, aprendemos a desenvolvernos y terminamos evolucionando o mutando, sólo para poder llegar a otro mundo en miniatura. Y es porque cada persona tiene anhelos y es por eso que buscamos algo más. Y a eso es a donde estoy yendo.

XXX

Nova Moebius.

viernes, marzo 25

Bruma

Calculo que en algunos momentos de nuestras vidas todos nos preguntamos si el camino que estamos recorriendo es el correcto. Este es uno de esos momentos.
Desde hace tiempo que estoy siendo golpeada. La muerte a veces visita a la misma familia durante algún periodo de tiempo… Pero estoy bien. O eso creo. La verdad no lo estoy.
Y no es solo la perdida física. Es algo más. Es el encontrarse una tarde tratando de tener una charla con esa persona que hoy por hoy no esta. Es saber que no voy a escuchar su voz ni a recibir esos abrazos calidos. Y eso duele.
Y eso se suma a mi actual y total perdida sentido. Porque siempre trate de saber hacia donde tenía que ir. A donde correr y con quien estar. Pero en estos días (que por cierto son terribles) mantener la sonrisa para los demás duele, y mucho.
Todo el tiempo, desde que me levanto hasta que me acuesto estoy pensando si lo que estoy haciendo vale la pena. Y es tanta la oscuridad y la confusión que la respuesta es siempre la misma: no.
Pero respiro hondo y me vuelvo a dormir para despertarme y seguir en este ritmo agotador donde no tengo un segundo para dedicarme a mi. Para pensar que es lo que quiero y que es lo que necesito.
Incluso escribir es una tarea infinita. Nada me deja satisfecha, nada me termina de gustar y lo que es peor, las palabras que conozco van desapareciendo mientras me quedo con un vocabulario más que escaso. Horrible.
Así que calculo que quiero limpiarme un poco. Transformar el dolor en algo un poco menos amargo. Porque me estoy hundiendo cada vez más. Hay veces que me miro al espejo y no me reconozco, simplemente no se quien es la persona que me mira del otro lado.
Se que “hoy” también va a pasar. Se que mañana voy a seguir peleando, aunque no tenga muy claro el porque, ni como. Eso es lo que más duele, saber que en este momento no tengo a donde dirigirme, porque sencillamente no se a donde ir.
Ya me canse de llorar por las noches y lo que es pero, por más lágrimas que derrame, este sentimiento sigue estando.
Así que hoy estoy sincerándome con una hoja en blanco. Se que necesito encontrarme para poder comenzar de nuevo. Se que va a llevar algo de tiempo y que seguramente voy a llorar un poco más. Pero tengo la confianza (y la certeza) de que todo va a estar bien. Después de todo, mañana va a ser otro día.
XXX
Nova Moebius.